Todos tenemos ese amigo que antes de comer nos para a todos, mueve los platos, se sube a la silla para encontrar el ángulo ideal y enciende más luces en el restaurante si es necesario, solo por hacer la foto perfecta para Instagram.
Seguro que siete años atrás ni los propios creadores imaginaron que Instagram, ese canal que nació como una red social en la que compartir fotos, se fuera a convertir en un canal casi imprescindible para vender nuestra imagen tanto personal como comercial.
Hoy en día nos encontramos en un mar de competencia donde es muy difícil destacar, donde todos nos creemos fotógrafos y luchamos a distintas voces para ser diferentes. Sin embargo, aunque publicar es fácil, no lo es tanto obtener resultados: Conseguir comunidad y engagementno es tarea fácil, y menos con los continuos cambios en su algoritmo.
Aquí vamos a dejaros algunos consejos que hemos aprendido tras nuestra experiencia para empezar a crear la comunidad de tu marca.
El primer paso, antes de crear tu cuenta, es tener claras estas preguntas: ¿Está ahí mi público objetivo? ¿De qué voy a hablar?Estas preguntas son imprescindibles, pues de nada sirve invertir tiempo en un lugar donde no están aquellos a los que interesas.
Teniendo claro de qué y a quién voy a hablar, comenzamos:
- Cuidar nuestra imagen es vital. Cada vez somos más exigentes con lo que vemos y queremos. Por lo que cuidar las imágenes, la cromática y calidad de nuestro feedes muy importante. Moderno, fresco y atractivo, con algún toque de diferenciación, son las principales características que trabajaremos.
- ¡Los hashtags han abierto un mundo de oportunidades! Permiten que las marcas ganen exposición en audiencias muy segmentadas, siempre y cuando los utilicemos correctamente. Además, generar nuestros propios hashtags nos permitirá organizar las conversaciones. ¿Sabías que el 70% de ellos han sido creados por marcas?
- Conexión, como si fuéramos amigos. Debemos de tener claro que los usuarios son personas y, como personas, lo que buscan es conectar con la marca. Cuanto más personal sea el perfil y más cercana sea la comunicación con ellos, más conexión habrá. A fin de cuentas, pasamos tiempo en Instagram para desconectar y pasar un buen rato.
- ¡No podemos olvidarnos del resto de canales! Nada mejor para empezar a construir tu comunidad que con aquellos a los que ya sabes que interesan tus contenidos en otros canales. ¡Anímales a seguirte!
- La realidad antes que la ficción. Lo que sin duda más valora Instagram son las cuentas que tienen una comunidad real. Para llegar a ellos no hay nada mejor que invertir en contenidos que les resulten interesantes, que puedan atraer su atención y comiencen así a seguirte.
- Mayor impacto en menos tiempo. Instagram Stories humaniza a las marcas y las acerca a los clientes más potenciales. Llegaremos a nuestro público usando contenido directo y adaptado a sus intereses, logrando captar su atención y transmitir el mensaje en segundos.
- Estar dónde y cuándo están. ¿De qué sirve publicar dónde y cuándo no hay nadie a quien intereses? Aprovechemos las estadísticas que tenemos y publiquemos a la hora que más usuarios hay conectados para conseguir mejores resultados. ¡Y no te olvides de seguir e interactuar con los usuarios con los que compartes intereses!
Estos son solo 7 consejos que te ayudarán a crecer, pero existen muchos más trucos que te ayudarán a sacarle el máximo partido a tu cuenta. ¡Te los contaremos otro día!
